El lanzamiento del Nokia Lumia 900 en Estados Unidos con AT&T, por 100 dólares, es, según Sarah Rotman Epps, analista de Forrester, el inicio de algo importante: Windows Phone como irruptor del mercado entre los exitosos teléfonos iPhone y Android.
Windows Phone, el sistema operativo móvil de Microsoft que utiliza Nokia para su línea de smartphones Lumia, aún representa una pequeña parte del mercado de teléfonos inteligentes, con menos del 3%. Según escribe esta analista en su blog, el mercado de los smartphones está preparado para recibir a un tercer jugador, un puesto deseado por cualquiera. Epps considera que ese papel podrían desempeñarlo Nokia y Microsoft si fueran capaces de convertir a los usuarios de BlackBerry hacia Windows Phone en un plazo de dos años. El uso de BlackBerry cae y actualmente representa el 8% del mercado global de smartphones, según IDC. Hacerse con esos clientes “podría ser un objetivo modesto pero alcanzable para Windows Phone”.
Atraer a los antiguos usuarios de BlackBerry y a parte de los usuarios de Symbian en China e India hacia Windows Phone “posicionaría a Nokia y Microsoft como una tercera plataforma viable y rompería con la hegemonía de Google y Apple”, opina Epps.
La analista admite ser una férrea defensora de Windows Phone tras haber utilizado el sistema operativo en el HTC Trophy y el Samsung Focus Flash como terminales personales. Ahora, tiene un Nokia Lumia 900 para análisis. El terminal acaba de lanzarse en Estados Unidos a un precio de 99,99 dólares con AT&T, con el objetivo de atraer a nuevos usuarios de smartphones y seducir a los clientes de BlackBerry que aún pagan a sus operadores por su planes de datos. Dado que BlackBerry ha dicho que no tendrá nuevos modelos de smartphones pronto, estos clientes deberían ser el principal objetivo, estima la analista.
Nokia y Microsoft han “creado un gran producto”, señala Epps quien, en una entrevista, reconoció que le gusta el diseño industrial del Lumia 900, incluyendo su forma delgada y su “satisfactorio tacto”. Afirma que la resolución de la pantalla es mejor que la del Trophy y que tiene una cámara frontal que le falta al terminal de HTC. Epps también se muestra de acuerdo con que Nokia, Microsoft y AT&T no van a persuadir a los usuarios de iPhone para cambiar a Windows Phone, pero mantiene que el Lumia 900 podría atraer a los de BlackBerry y a los primeros compradores de un teléfono inteligente.
Nokia y AT&T promocionarán el Lumia 900 en condiciones excepcionales. Para Epps, el apoyo que la operadora prestará al smartphone de Nokia será clave para su éxito. A cambio, Nokia ofrecerá a AT&T un importante margen sobre las ventas de los teléfonos. “Los operadores venden los terminales con los que pueden hacer más dinero”, explica la analista de Forrester. “Aquel que paga al operador, vende el teléfono”, sentencia.
Vía | IDG